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| (Es la primer y -espero- única foto a color del blog. Es parte de mi ciclotimia. Gracias Toto) |
Resuena porque me pasa que hoy no puedo definir con exactitud mi estado anímico. Estoy mal, estoy melancólica, estoy nostálgica y por momentos, hasta miserable. Pero no, no estoy al borde de una crisis ni mucho menos de terminar arrastrándome por aquél pasado en tu habitación. Creo (exacto, creo) que está superado, pero no voy a andar especulando con que sí y con que no; ya pasamos a otra etapa. Ahora si te veo, es de casualidad y ojalá que no te vea.
Los cambios y encuentros de la vida me demostraron que podía estar bien así, sin absolutamente nada por lo que sufrir. Sin presente, sin futuro y con un pasado un tanto tormentoso que -a veces- hasta me hace sonreír en mi afán de extrañarte.
Hoy no quiero querer y tampoco que me quieran... Sincerándonos, ¿cómo podría mentirte? Si eso es lo que más quiero en el mundo… Aunque, sí, necesito estar sola, necesito no lamentarme nunca más por lo que no es ni nunca será, porque soy desechable, horriblemente desechable y nadie sabe ni se imagina cuánto duele ser así.
Una cosa me queda por decirte: Espero que aproveches la lluvia.
MLdP